Daños a la propiedad: Los gatos pueden causar daños a muebles, cortinas, alfombras, telas y diversos objetos en el hogar.
3. Problemas con otras mascotas: Los gatos pueden ser agresivos con otras mascotas, especialmente si se sienten amenazados o tienen problemas de marcación territorial.
4. Problemas con la fauna silvestre: Los gatos pueden ser depredadores y pueden matar aves, murciélagos y otros animales silvestres, aunque por otro lado mantendrán a raya a ratas y ratones e incluso algunos insectos rastreros.
5. Transmisión de enfermedades: Esto ya es más serio: Los gatos, especialmente los callejeros y silvestres que no están sujetos a control veterinario alguno, pueden transmitir enfermedades a las personas y a otras mascotas, como la toxoplasmosis, la salmonelosis y la gripe felina.
Los gatos pueden transmitir varias enfermedades a las personas y a otras mascotas, incluyendo:
Toxoplasmosis: Es un parásito que se encuentra comúnmente en las heces de gatos y puede ser transmitido a las personas a través de la ingestión de alimentos contaminados o la manipulación de tierra o arena para gatos infectados.
Salmonelosis: Es una bacteria que se encuentra comúnmente en la orina y las heces de los gatos y puede ser transmitida a las personas a través del contacto con la piel o la ingestión de alimentos contaminados.
Gripe felina: Es un virus que puede ser transmitido a las personas a través del contacto con secreciones respiratorias de los gatos infectados.
Rabia: Es un virus mortal que se transmite a las personas a través del contacto con la saliva de un gato infectado, generalmente a través de una mordedura o un rasguño.
Importante: Recomendamos que siempre tras tocar o acariciar a un gato se lave bien las manos Los gatos son unas mascotas maravillosas, pero al igual que con los perros y demás mascotas siempre existe riesgo de que puedan transmitir alguna enfermedad. Cuide su salud y la de los suyos.